24/06/2016 – 31/10/2016
Asociada con el arte conceptual, la performance, el grupo neo-vanguardista Fluxus y los happenings de los 60, Ono ha sido, sobre todo, una pionera en el cuestionamiento del concepto y el objeto de arte. Ha roto las fronteras tradicionales que dividen las distintas disciplinas artísticas y ha creado un nuevo modo de relación con los espectadores.
Usando un lenguaje claro y universal, Ono produce objetos, eventos, rituales y acciones, cuya precisa elaboración se completa a través de la participación del público. Las “instrucciones” son piezas compuestas por mensajes simples y poéticos, que invitan a los espectadores a realizar determinadas acciones, como “escuchar el sonido de la Tierra girando” o “encender un fósforo y vigilar hasta que se consuma”.
El proyecto expositivo contempla dos instancias: por un lado, la propia muestra en las salas de MALBA; por otro, la exposición y difusión de gran parte de las obras en el espacio público (carteles, colectivos, anuncios publicitarios), los medios masivos de comunicación (diarios, revistas, radio y televisión) y las redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram, Tumblr).
De este modo, Yoko Ono amplifica el alcance de una obra con un fuerte compromiso social y político, a partir de su militancia a favor de movimientos como el feminismo, el pacifismo y el ecologismo. En Dream Come True, la artista nos invita a atravesar una experiencia transformadora en nuestra relación con nosotros mismos y con los demás.
Sobre Yoko Ono
Tokio, Japón, 1933. Vive y trabaja en Nueva York.
Proveniente de una familia tradicional japonesa, durante su infancia vivió en ciudades como Nueva York, San Francisco y Tokio y recibió desde muy temprana edad, educación musical, pianística y vocal. Fue la primera mujer admitida en la carrera de Filosofía de la universidad japonesa Gakushuin y más tarde se licenció en poesía y composición contemporáneas en la universidad Sara Lawrence College.
En 1961 comenzó una carrera artística vinculado al arte conceptual y participativo, la música de vanguardia, los films experimentales y las performances que generaron interés por parte de personalidades como Peggy Guggenheim, Marcel Duchamp, George Maciunas y realizó trabajos en colaboración con artistas como Nam June Paik y el grupo Fluxus. En 1964, publicóPomelo[Grapefruit], su mítico libro de instrucciones.
En 1966 conoció a John Lennon, quien no solo se convirtió en su pareja sino en el co-autor de un conjunto de performances, films y piezas musicales. Su vinculación a la música pop fue creciendo y juntos crearon la banda Plastic Ono Band. Después de la muerte de Lennon, Ono permaneció en un período de duelo por varios años, y realizó varias producciones de música y video en relación a su estado de pérdida. A partir de 1989 y en los años 90, volvió a participar en exposiciones en donde presentó una nueva serie de esculturas hechas en bronce, muchas de las cuales aludían a sus obras de los 60. Desde principios del siglo XXI se mantuvo muy activa en exposiciones de arte, intervenciones en espacio públicos y participaciones musicales con reconocidos artistas. Su interés por internet, la convirtió en una de las primeras artistas que se interesó por usar el medio para exposiciones virtuales.
Fuente: http://www.arte-online.net